Todos
juntos, en un solo día…no sabría qué hacer con tantos parabienes.
Lo
que sí sé es volver a decirles Gracias a todos por sus mensajes.
¿Qué
haré con las felicitaciones?
Primero,
pienso que todos ustedes son grandes personas, llenos de sanas intenciones, con
un gran corazón y un pensamiento positivo. Sus palabras de Felicitaciones me
hacen ser una persona agradecida, una persona que me sient feliz por la vida que me regalaron, el
talento que me concedieron y la voluntad para ponerlos en acción.
¿Qué
haré con sus buenos deseos?
Esos
buenos deseos surgidos de lo más sagrado de su ser, serán la fuerza del genio
de “otra lámpara de Aladino”. Volveré a analizar mis deseos…y son los mismos
que pedí a mi Dios cuando yo tenía doce años: Le pedí Salud, Trabajo, Voluntad
y Ganas de servir a los demás. Esos deseos de ustedes me fortalecen, me
enorgullecen y me dan el ejemplo para seguir deseando buenas cosas para mí y
las mejores para los demás.
¿Qué
haré con sus bendiciones?
Recordar
el Bien Decir, y el Mejor Hablar acompañado de un Mejor escribir para
compartirlas, y sembrarlas en los demás.
Sus
bendiciones son suficientes para los próximos años. Son demasiadas bendiciones.
Gracias por ello a todos ustedes.
¿Qué
haré con los buenos augurios?
Seguir
disfrutando cada día como el mejor y único de mi existencia. Me dieron el mejor
de los regalos: Sus pensamientos buenos, sus sentimientos sinceros y su deseos
auténticos.
Gracias
por acompañarme en esta fiesta de nuestro cumpleaños: el de mi gemelo que está
en el Cielo (alla ha cumplido años también),
y el de mi mamá convertida en Angel en el Paraíso Celestial y en el mio
que sigo en este bello y único Paraíso Terrenal porque los tres nacimos
(nosotros como gemelos, ella como nueva mamá de gemelos) en la misma fecha solo
que en diferente hora.
Mis
felicitaciones, mis mejores deseos para todos ustedes, las Bendiciones del
Creador y los mejores augurios para su vida de cada día y para cada día de su
hermosa vida.
Gracias.
Luis
Molina Canales.