Día 24. Hoy es un buen día para decirme que: “No hay pasado
sin recuerdos, ni futuro sin esperanza.”
Existen pasados con recuerdos
de todo tipo. Los hay de risas y de lágrimas; de alegrías y sinsabores; de
dolores y placeres.
Lo interesante del pasado es aprovecharlo para aprender de
los errores o aciertos, agradecer lo recibido o compartido, olvidar lo incómodo
o pesado, eliminar lo doloroso o sacrificado,
y sellar pasajes y de paso “sepultar olvidos”.
Veamos el futuro,
nuestro anhelado y esperado futuro. Casi todos lo vemos prometedor; pensamos
que vendrán tiempos mejores, decisiones afectivas y acciones contundentes, y
nos vemos avanzando cada día. Lo importante es empezar hoy a crear ese deseado futuro.
Lea en voz alta: “SOLO POR HOY recordaré y esperaré lo mejor.”