22/3/16

"En un día claro se ve hasta siempre."

El cielo, el universo y la eternidad son, para mí,  los verdaderos límites de la mente humana. Las limitaciones pertenecen a cada uno de nosotros, si les hacemos caso.

“En un día claro se ve hasta siempre” es el titulo de una película de los 70s dirigida por Vincent Minelli. Lo que me gusta de ella es el título que traigo a comentario.

La claridad de la luz es la que nos permite ver lejos, muy lejos. Esa misma claridad debería darse en nuestro interior, muchas veces empañada u oscurecida por cuestiones sin importancia, o por cuestiones menores, o sin utilidad.

La claridad de nuestro interior se da cuando definimos nuestra meta, porque hemos conocido nuestra vocación y hemos decidido practicarla.

La claridad de nuestro interior se da cuando hemos conocido y utilizado la fuerza del amor y del perdón.

La claridad de nuestro interior se da, también, cuando vemos a nuestra existencia como parte importante de la existencia de los demás.

La claridad de nuestro interior se manifiesta cuando estamos respondiendo con alegría por todas nuestras obligaciones y deberes.

La claridad de nuestro interior se ilumina, cada vez más, cuando aportamos algo para que se siga dando el milagro de la vida cotidiana.

Y usted, ¿en un día claro ve hasta siempre?

Hasta pronto.

Escuela del Razonamiento 19 sept 2023