Yo, la Ausencia, tengo el honor de escribir y describirme.
Me he dado cuenta que parece que solo sirvo para provocar dolor; sin embargo, no es así. Claro que estoy muy cerca de un familiar mio llamado Olvido. Es posible que, con el tiempo ya no sea Ausencia sino Olvido. Y eso alivia.
Yo, la Ausencia soy útil para recordar, pero recordar para que te conviertas en una mejor persona. Que dejes de sentir solo en tí; te recomiendo que alivies el dolor de otras personas cuando surja mi presencia.
Yo, la Ausencia no soy para que sufras, soy para que agradezcas el tiempo y todas las cosas que compartiste con ese ser ausente.
Yo, la Ausencia llego a tí para que reflexiones cómo puedes enseñar a los demás a disfrutar cada momento que están viviendo y no lo dejen "para mañana".
Yo, la Ausencia también llego a tí disfrazada de culpa. Es posible que llores y sufras más por culpas que por dolor de ausencias. Es posible que surja en tí dolor por no haber hecho o dicho las cosas de manera diferente cuando el ausente estuvo presente.
Yo, la Ausencia soy una gran maestra para que aprendas a vivir contigo, en ti y por tí.
Yo la Ausencia me presento porque viviste con alguien, porque compartiste tu vida, tu sonrisa, tu alma, tu esperanza y tu todo. Así es que si llego a tí como la Ausencia es porque hay Presencias en tu ser, tu recuerdo, tu mente y tu alma.
Recuerda: "Hay ausencias que son presencias."
Hasta pronto.
Me he dado cuenta que parece que solo sirvo para provocar dolor; sin embargo, no es así. Claro que estoy muy cerca de un familiar mio llamado Olvido. Es posible que, con el tiempo ya no sea Ausencia sino Olvido. Y eso alivia.
Yo, la Ausencia soy útil para recordar, pero recordar para que te conviertas en una mejor persona. Que dejes de sentir solo en tí; te recomiendo que alivies el dolor de otras personas cuando surja mi presencia.
Yo, la Ausencia no soy para que sufras, soy para que agradezcas el tiempo y todas las cosas que compartiste con ese ser ausente.
Yo, la Ausencia llego a tí para que reflexiones cómo puedes enseñar a los demás a disfrutar cada momento que están viviendo y no lo dejen "para mañana".
Yo, la Ausencia también llego a tí disfrazada de culpa. Es posible que llores y sufras más por culpas que por dolor de ausencias. Es posible que surja en tí dolor por no haber hecho o dicho las cosas de manera diferente cuando el ausente estuvo presente.
Yo, la Ausencia soy una gran maestra para que aprendas a vivir contigo, en ti y por tí.
Yo la Ausencia me presento porque viviste con alguien, porque compartiste tu vida, tu sonrisa, tu alma, tu esperanza y tu todo. Así es que si llego a tí como la Ausencia es porque hay Presencias en tu ser, tu recuerdo, tu mente y tu alma.
Recuerda: "Hay ausencias que son presencias."
Hasta pronto.